Cuando compramos una tarjeta gráfica, lo único que tenemos en cuenta es si la fuente de poder que usaremos incluye los conectores necesarios para la alimentación y si el total de watts es suficiente. Hasta aquí todo está bien, es un buen comienzo para combinar una fuente de poder con una determinada tarjeta gráfica, pero hay un aspecto secundario, pero muy importante que debemos tener en cuenta, lo explicaré un poco más adelante.
El problema
Compre una tarjeta gráfica que consume alrededor de 170 watts, esta tiene 2 conectores PCI de 8 pines, todo está bien, todo funciona de maravilla, la fuente de poder es de 400 watts y de una marca decente. El problema es que al jugar luego de unos minutos la computadora se reinicia sin ningún tipo de error o advertencia.
¿Qué puede estar ocasionando esto?
Si descartamos que la tarjeta gráfica se encuentre dañada, lo único que puede quedar es procesador o memoria RAM, pero si también descartamos que estos componentes estén dañados queda la fuente de poder. ¿Cómo lo sé? El único cambio realizado fue instalar la tarjeta gráfica y esta ya ha sido probada correctamente en otros sistemas muy similares.
¿Es un problema de drivers?
Lo dudo, si fuera un problema de drivers tendríamos errores y pantallazos de Windows, en cambio, son reinicios instantáneos en el ámbito de hardware.
Descripción real del problema
En palabras sencillas, la fuente de poder no tiene la capacidad necesaria en el riel de +12 volts, que es el riel que alimenta a las tarjetas gráficas y al procesador. Si leemos la etiqueta de nuestra fuente, esta nos dice cuál es el límite en amperes o watts por cada riel, por ejemplo, en el sistema que tuvo el problema del reinicio automático el amperaje máximo soportado en +12v era de 25 amperes.
Para calcular el límite en watts simplemente multipliqué 25 amperes por 12 volts, y dio como resultado dio 300 watts. Un Ryzen 5 2600 como máximo consume 65 watts (sin overclock), y una RX 580 8 GB puede llegar a usar 188 watts. Si lo sumamos obtendremos un 80% (aproximado) de uso de la capacidad de ese riel.
Contrario a lo que mencioné anteriormente, aun así, el verdadero problema no era este, aunque sí estuvo bastante cerca de ser el problema. Esto es debido a que la fuente de poder tenía 2 salidas de PCI de 6 pines, qué combinados daban 150 watts limitados por la especificación de ATX, el riel de 12 volts si soportaba a la tarjeta gráfica, pero el hecho de que los fabricantes se guían por especificaciones hace que tengan límites por conector y que incluso con adaptadores no sea suficiente.
Solución al problema
Lo ideal es comprar una fuente de poder con mayor cantidad, pero para las personas que no pueden darse ese lujo, con la herramienta MSI Afterburner podemos limitar la cantidad máxima de watts que nuestra tarjeta gráfica usa y así podemos usarla sin ningún problema mientras actualizamos nuestra fuente de poder.
Configuración usada
Esta experiencia la obtuve con una AMD RX 580 8 GB MSI y una fuente de 400 watts SilverStone, usando adaptadores de 6 pines a 8 pines, simplemente no entendía por qué se reiniciaba tan seguido. Si tenemos dudas podemos leer: usar una fuente menor a la recomendada.
